El universo es tan perfecto que está hecho a base de ciclos, están en todo lo que hacemos, pero en ocasiones para poder comenzar uno nuevo debes terminar el anterior sino deberás cargar con un costal lleno de situaciones inconclusas.
¿Y qué pasa cuando termina un ciclo?...... pues nada, la vida sigue. Lo que sucede es que deseamos continuar las cosas, alargamos las novelas, rellenamos historias que no dan para más, nos aferramos a lo que era y deseamos que vuelve a ser así pero seguramente si hubiera una segunda oportunidad descubriríamos que nada es como antes, que sólo añoramos lo que eramos pero que no vale la pena lo que sería en este momento. Nada pasa de la misma forma dos veces.
Porque cerrar algo no es tirarlo al olvido, es sólo una manera de mirar atrás sabiendo que el pasado es sólo un buen o mal recuerdo pero que jamás volverá a ser presente.
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