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Es distinto cuando lo vives todos somos más empíricos de lo que parecemos yo sólo quería comprobarlo por mi misma y no me arrepiento de nada en esta vida cuesta trabajo (es obvio) asimilar los fracasos, las pérdidas, duele caerse de lo más alto de las nubes, es difícil saberse solo, es complicado cuando la decisión viene de ti, cuando eres responsable y todos los dedos te apuntan pero en el fondo lo sabes, tú lo sabes, al final todo será mejor, porque detrás del mínimo gesto, palabra o pensamiento siempre hay algo impulsándolo, porque toda decisión se toma pensando o sintiendo algo que no tiene la más mínima lógica pero que al final del día hará de este miserable mundo o al menos de nuestro mundo un lugar mejor.

En algún momento del día, cuando pasaba por un lapso de egoísmo total llegué a sentir ganas de caminar hacia atrás, de ir de regreso al lugar "seguro" pero la verdad es que no existe un lugar seguro, en México ya no hay un lugar seguro, no estamos exentos, el martes te caes, el miércoles sientes que pierdes algo que no fue tuyo, te arrebatan lo que no quieres pero ya se siente como tuyo y duele, duele al subir escaleras, al recargar la mano o al ver a lo lejos ciertas escenas pero de eso se trata de sentirlo todo, lo bueno y lo malo.

Perdón...

Perdóname si guardo silencio, si no puedo ser buena compañía, si mis emociones se escurren entre miradas, si te hago lo mismo, si arranco los pedazos, si no confío, si evado, si respiro sin existir, si actúo sin pensar, si pienso en vez de actuar, si me tardo en regresar, si no vuelvo jamás, si te evito, si finjo que no pasa nada, si no me conmuevo, si no siento, si soy egoísta, si me dejo caer, si me voy sin despedirme, si te miento, si me miento, si te ignoro, si no me interesa el mundo, si cierro los ojos durante el trayecto a casa, si quiero desaparecer, si te daño, si te aburro, si te abrumo, si te estreso, si te ruego que me mires, si no quiero estar aquí ni allá, si soy lo que la sociedad quiere, si huyo de la globalización, si me asusto fácilmente, si te complazco, si te digo que no, si soy confusa, si soy depresiva, si no puedes entenderme, si no tengo fe, si no tengo sueños, si se acabó la pasión, si no soy lo que quieres, si no quiero lo que eres, si no te amo, si soy auto destructiva, si le doy valor al dinero, si no entiendo tu compleja mente, si no soy justa, si te fallé, si te abandoné, si te dejé caer, si te olvido, si te alejo, si soy un maldito ser humano más...

Cicle of life...

El universo es tan perfecto que está hecho a base de ciclos, están en todo lo que hacemos, pero en ocasiones para poder comenzar uno nuevo debes terminar el anterior sino deberás cargar con un costal lleno de situaciones inconclusas.

¿Y qué pasa cuando termina un ciclo?...... pues nada, la vida sigue. Lo que sucede es que deseamos continuar las cosas, alargamos las novelas, rellenamos historias que no dan para más, nos aferramos a lo que era y deseamos que vuelve a ser así pero seguramente si hubiera una segunda oportunidad descubriríamos que nada es como antes, que sólo añoramos lo que eramos pero que no vale la pena lo que sería en este momento. Nada pasa de la misma forma dos veces.

Porque cerrar algo no es tirarlo al olvido, es sólo una manera de mirar atrás sabiendo que el pasado es sólo un buen o mal recuerdo pero que jamás volverá a ser presente.

De repente regresas a la realidad y te descubres haciendo cosas que jamás imaginaste hacer, compartiendo con gente desconocida, escuchando atento, riendo, venciendo miedos infantiles, perdonando, creciendo, tomando café, viviendo.

A los solitarios nos sorprende la unión en cualquiera de sus formas, supongo que así es la vida, a veces nos da menos de alguna cosa para que la valoremos mas.

Let it glow...

Cuando somos niños, nos tapamos los ojos con las manos para no ver las cosas que nos desagradan o lo que los adultos nos han enseñado no debemos ver. Cuando nos volvemos adultos esta situación no cambia del todo, vivimos con los ojos cerrados ante lo que pasa en el mundo, esas cosas nos siguen pareciendo grotescas e incluso nos ponemos vendas para no ver la verdad frente a nosotros, no es cuestión de interpretación de los hechos es un problema de visibilidad. No tapemos nuestros ojos, es mejor quejarse de la poca luz del mundo que estar en total oscuridad.